¡La Campaña de 40 Días por la Vida está salvando bebés y mamás!
Padre Shenan J. Boquet
Presidente
Vida Humana Internacional
Publicado originalmente en inglés el 27 de febrero de 2023 en: https://www.hli.org/2023/02/40-day-for-life-2023/
Publicado en español en el Boletín Electrónico “Espíritu y Vida” de Vida Humana Internacional, el 2 de marzo de 2023.
Vol. 07.
No. 03.
Y también en la página web de Vida Humana Internacional www.vidahumana.org en:
Temas\Cultura de la Vida\Vida Espiritual\22 –
Vida Humana Internacional agradece a José A. Zunino la traducción de este artículo.
¡Tocad la trompeta en Sion! Proclamad un ayuno, llamad a una asamblea. Congregad al pueblo, purificad a la comunidad, reunid a los ancianos, juntad a los pequeños y a los niños de pecho… Entre el atrio y el altar lloren los sacerdotes, ministros de Yahveh y digan: “Perdona, Yahveh a Tu pueblo.” ― Joel 2:15-17.
La desaparición de Roe vs. Wade (el fallo del Tribunal Supremo que legalizó el aborto en todo EEUU en 1973) ha cambiado fundamentalmente el debate sobre el aborto en los Estados Unidos. Todas las señales apuntan a que las tasas de aborto se desploman en los estados que han prohibido el aborto por completo, o en su mayoría, desde la anulación de Roe. Y hay razones para esperar que más estados hagan lo mismo.
Sin embargo, como tantas veces he enfatizado en los últimos meses, no podemos permitirnos estar cómodos. ¡La triste realidad es que en los estados donde el aborto sigue siendo legal, cientos de miles de mujeres abortarán este año!
Aunque nunca hay una razón que pueda justificar el asesinato de un niño no nacido, es importante que los defensores de la vida entiendan que, para muchas de estas mujeres, los días previos a su aborto programado estarán entre los momentos más oscuros de su vida.
Los estudios muestran consistentemente que muchas mujeres que abortan se sienten presionadas o directamente coaccionadas a tomar esa “elección”. De hecho, un estudio muy reciente revisado por pares ¡fijó ese número en más del 60%! Muchas de estas mujeres tienen novios o esposos que no las apoyan, que incluso las abusan abiertamente o que no quieren tener nada que ver con su propio hijo y que amenazan con dejar la relación a no ser que sus novias o esposas se hagan cometer un aborto. Frente a la perspectiva de “hacerlo solas”, estas mujeres a menudo confiesan sentirse abrumadas por los temores sobre sus perspectivas de trabajo o estabilidad financiera a largo plazo.
Tampoco sirve de apoyo a la vida el hecho de que vivamos en una cultura que denigra la maternidad, que enfatiza la naturaleza superior del éxito profesional y la “productividad” económica, y que finge que abortar es un procedimiento médico simple e intrascendente. Como consecuencia, tantas mujeres con embarazos no planificados están rodeadas únicamente de voces y mensajes que las instan a darse cuenta de que abortar “no es gran cosa” y que será “mejor” para ellas.
Digo que es importante que tengamos una comprensión profunda de la realidad que enfrentan las mujeres con embarazos en crisis, porque hacerlo puede abrirnos los ojos para ver formas en que cada uno de nosotros, como personas provida y como movimiento, podemos salvar las vidas de los niños no nacidos y proteger a sus madres de toda una vida de arrepentimiento y dolor. En otras palabras, debemos estar presentes para ayudar a las mujeres tentadas por el aborto.
Podemos ser la única presencia en su vida que se preocupa por ellas y por su hijo por nacer lo suficiente como para decirles la verdad. Podemos ser los únicos que se acerquen a ellas con un mensaje de esperanza, amor y valor. Podemos ser los únicos que afirmemos la inmensa dignidad y la gran alegría de la maternidad, frente a la cual casi todo lo demás que un ser humano puede hacer palidece en comparación. Podemos ser los únicos que les digamos que tienen toda la capacidad y la fuerza que necesitan para ser una buena madre.
Pero debemos decirles que nosotros las vamos a ayudar. No importa que no seamos nosotros mismos los que les demos los recursos que necesitan para llevar adelante su embarazo y cuidar a su bebé después. Basta con que personalmente la pongamos en contacto con las personas que se encargan de estas ayudas. Lo importante es que estas madres que se sienten solas y abandonadas sepan que hay alguien que se responsabiliza personalmente por brindarles ayuda y no alguien que diga de forma abstracta o distante: “No te preocupes, hay personas por ahí que te van a ayudar” y luego no hacer nada.
Al actuar de manera personal podemos ayudar a estas madres a descubrir un camino diferente a seguir: uno que no conducirá a la muerte de su hijo y a una vida de arrepentimiento. Las mujeres que enfrentan un momento de crisis necesitan saber que no están solas. Es decir: estamos ahí para ellas y para sus hijos.
40 Días por la Vida: Una forma de estar presente
Cuando digo que podemos “estar allí” para las mujeres, lo digo textualmente. Podemos estar físicamente presentes para ellas.
Por eso me encantan las campañas de 40 Días por la Vida que se efectúan dos veces al año. Al organizar cientos de vigilias de oración provida frente a centros de aborto en todo el mundo, 40 Días por la Vida facilita el ser un signo palpable de esperanza para las mujeres en su momento de crisis.
Oportunamente, una de las campañas anuales coincide con la temporada de Cuaresma: una temporada de oración, ayuno y arrepentimiento. La primera de las campañas de este año comenzó el pasado Miércoles de Ceniza, el 22 de febrero (2023) y terminará el 7 de abril, Viernes Santo.
Como siempre es el caso, las historias de vidas salvadas, simplemente porque los defensores de la vida estaban presentes en oración, comenzaron a llegar de inmediato. En el segundo día de esta campaña de Cuaresma, llegó un informe de un niño salvado en Milwaukee, Wisconsin. “¡Nos quedamos con nuestro bebé!” gritó una mujer al salir de la mal llamada “clínica” local del monstruo abortista Planned Parenthood. El blog de 40 Days relata: “Dan, el colíder de la campaña desde hace mucho tiempo, dijo que la mujer parecía aliviada cuando aceptó material informativo e instrucciones provida sobre dónde obtener un ultrasonido gratuito”.
“Este es el quinto rescate este año en un… centro en un estado donde el aborto es ilegal”, dijo Dan. “El asesoramiento en la acera en las proximidades del centro abortivo funciona. Todo el tiempo. Gracias, Jesús.”
Lo que más me gusta de las campañas de 40 Días por la Vida es leer historias como éstas, enviadas desde lugares de vigilia de todo el mundo. Muy a menudo, estas historias tienen que ver con la salvación de niños y sus mamás del aborto. En otras ocasiones, las historias son simplemente breves actualizaciones sobre la alegría y la determinación de los ciudadanos provida de todo el mundo.
El primer día de la campaña de este año, por ejemplo, el blog incluyó breves actualizaciones de las campañas en Taiwán y Alemania, solo dos de las numerosas campañas que se llevan a cabo a nivel internacional. El organizador de la campaña en Zhongli, Taiwán, dijo que el año pasado ¡más de 1,000 personas participaron en la campaña!
El mapa que muestra las ubicaciones de cada campaña es una colección impresionante de cientos de puntos rojos que se extienden por todo el mundo. Decenas de miles, si no cientos de miles, de activistas provida participarán en esta campaña, como lo hacen todos los años.
A Planned Parenthood le molesta que 40 días por la Vida sí da resultados
Si hubiera alguna duda sobre la efectividad de las vigilias de los 40 Días por la Vida, eso se disipa rápidamente con los números. Desde la fundación de 40 Días por la Vida en 2007, más de 22,855 niños y sus madres se han salvado de la violencia del aborto.
Sin embargo, es importante darse cuenta de que estos son solo los casos que conocemos. En una entrevista reciente, la líder del monstruo abortista Planned Parenthood se quejó de que, durante las campañas de 40 Días por la Vida, la tasa de “ausencia” [de mujeres que acuden a sus mal llamadas “clínicas”] se duplica o incluso más. “Normalmente ronda el 19%”, informa la publicación KQED, “pero durante las campañas, el número ‘se dispara al 40, a veces al 50%’”.
Nunca sabremos cuántas de estas mujeres finalmente eligen quedarse con sus hijos. Pero es razonable especular que muchas decenas de miles de otras mujeres han experimentado un cambio de opinión, sin que las voluntarias de 40 Días por la Vida se enteren. Y luego, por supuesto, están los 600 trabajadores del aborto que han dejado la industria del aborto en EEUU gracias al testimonio de los voluntarios de 40 Días y las 136 instalaciones de aborto que han cerrado.
Ese es el poder de la oración. Ese es el poder del testimonio. Ese es el poder de la presencia física.
¿Qué estas esperando?
La convicción de que toda persona humana, nacida y no nacida, posee una dignidad infinita otorgada por Dios tiene consecuencias de largo alcance. Para los defensores de la vida, es una convicción que se vuelve visible a través de nuestras acciones, todo lo cual influye en cómo vivimos y promovemos la Cultura de la Vida.
Es una convicción que moldea la forma en que respondemos al ataque contra el carácter sagrado de la vida humana y su dignidad, así como la forma en que brindamos atención, recursos y acompañamiento a las mujeres, sus hijos y familias, para que ninguna mujer se sienta coaccionada a elegir entre su futuro y la vida de su hijo por nacer.
Como dije anteriormente, lo que más me gusta de 40 Días por la Vida es lo fácil que les resulta a los provida de a pie marcar la diferencia.
En circunstancias normales, se necesita algo de determinación para simplemente presentarse frente a un centro de abortos y rezar u ofrecer asesoramiento en la acera. 40 Días por la Vida establece una estructura que facilita la inscripción y la unión a una comunidad de personas que se aconsejan, oran y se apoyan mutuamente.
Si estás cerca de una campaña de 40 Días por la Vida esta Cuaresma, realmente no hay razón para no ir. Todo lo que tienes que hacer es inscribirte, estar de pie durante media hora o una hora con tus amigos provida, rezar un rosario o dos y estar presente física y espiritualmente para las mujeres que necesitan desesperadamente la esperanza que puedes ofrecerles. Visita 40 Days for Life para encontrar el lugar más cercano a tu localidad donde los provida se reúnen para orar frente a un centro abortivo.
Los Evangelios cuentan la historia de un niño poseído por un demonio. Los discípulos de Cristo intentaron, pero fracasaron, expulsar al demonio. Y así, el padre del niño fue a Jesús, quien instantáneamente curó al niño y expulsó al demonio. Cuando sus discípulos le preguntaron por qué no podían expulsar al demonio, Cristo respondió: “Este género [de demonios] nunca sale sino con oración y ayuno” (Marcos 9:29).
Hay, en otras palabras, fuerzas demoníacas que requieren armas más fuertes. El aborto es uno de esos demonios (ver Evangelium Vitae, no. 100). Después de décadas de trabajo constante, a menudo sufriendo ingratitud, el movimiento provida ha comenzado a exorcizar este demonio de entre nosotros. Pero, aun así, debemos persistir.
40 Días por la Vida se fundó en gran medida para centrar la atención de los activistas provida en la dimensión espiritual de esta batalla. Simplemente no podemos esperar tener éxito en cuanto a expulsar el demonio del aborto por completo a través de nuestros propios esfuerzos. El fin del aborto requiere la conversión espiritual de toda nuestra sociedad, comenzando por cada uno de nosotros.
La cita del profeta Joel al comienzo de este artículo fue el pasaje de las Escrituras para el primer día de la campaña 40 Días por la Vida de este año. La Cuaresma es el momento perfecto para hacer eco de la oración suplicante del profeta Joel: “Perdona, oh, Señor, a tu pueblo”. ¡Perdona a tus hijos!
Espero que esta Cuaresma te tomes un momento y busques la vigilia de los 40 Días por la Vida más cercana (visita 40 Days for Life). Comprométete esta Cuaresma a ayunar un día a la semana por el fin del aborto, y luego ve y únete a tus compañeros guerreros de oración en la línea del frente. ¿Quién sabe a quién salvarás la vida y a qué madre desesperada podrías proteger de cometer el peor error de su vida?