El globalismo ataca la vida, la familia y la soberanía nacional (IV)
Adolfo J. Castañeda, MA, STL
Director de Educación
Vida Humana Internacional
Aviso: Para este artículo nos hemos basado en gran parte en el libro del pensador argentino Agustín Laje, GLOBALISMO. Recomendamos mucho su adquisición y lectura.
Actores y financistas del globalismo – El Banco Mundial (BM) de la ONU
El BM se dedica a presionar a los gobiernos nacionales para que cumplan con la antivida Agenda 2030 de la ONU, que ya hemos denunciado en detalle en artículos anteriores. El BM ha diseñado “La Estrategia de Género” y las “Normas Sociales de Género de la ONU para el Desarrollo para 2024-2030”. Promueve esta ideología como “igualdad de género”. Quiere un igualitarismo craso. Rechaza las diferencias hombre-mujer.
Pero la mayoría de la gente sensata no acepta la absurda ideología de género. Entonces el BM la acusa gratuitamente y sin prueba alguna de promover un “patriarcado” abusivo y de no aceptar los “derechos sexuales y reproductivos” (= aborto). Y de fomentar la “violencia de género” contra mujeres y “minorías sexuales”.
Ellos, el BM y sus aliados, son tan arrogantes que creen saber más que la gente de a pie, a quienes en realidad desprecian. Lamentablemente, el BM tiene el dinero para obligar a los países a cumplir sus agendas: más de 10 mil millones de dólares. Este dinero proviene de los contribuyentes de países ricos liberales miembros de la ONU. Pero también de países con ingresos medianos.
Con estos vastos recursos, el BM condiciona la ayuda monetaria a la aceptación de sus agendas. Ya el Papa San Juan Pablo II había condenado en general este tipo de presiones económicas abusivas en su Exhortación pastoral Familiaris Consortio sobre la familia cristiana en el mundo actual (1981), no. 30:
… hay que rechazar como gravemente injusto el hecho de que, en las relaciones internacionales, la ayuda económica concedida para la promoción de los pueblos esté condicionada a programas de anticoncepcionismo, esterilización y aborto procurado.
El BM y sus compinches globalistas también son anti democráticos. Imponen su agenda de arriba para abajo. Quieren modificar la cultura, las conductas y presionar a los sistemas políticos por medio de una ingeniería social global. Utilizan para ello una “educación” globalista impuesta desde la infancia.
Actores y financistas del globalismo – El Banco Interamericano de Desarrollo
El BID fue fundado en 1945 por la Organización de Estados Americanos (OEA) pero funciona independientemente. Tiene su sede central en Washington, DC. Se dedica a dar préstamos a los países de esta Región pero condicionados a su modificación política y cultural en conformidad con los siguientes asuntos: la peligrosa Agenda 2030, la engañosa ideología de la “igualdad de género y la diversidad”, la ideología de un supuesto y globalmente catastrófico “cambio climático”, la inmoral “educación integral en sexualidad” (EIS) y el aborto encubierto por medio de la promoción de los “derechos reproductivos”.
El total de préstamos concedidos por el BID hasta 2024 fue poco más de 5 millones de dólares. Sin embargo, en 2018 dio a Argentina 200 millones de dólares para que implantara la EIS en sus escuelas y para promover el aborto, esto último a pesar de que ese país había rechazado el aborto ese año.
Actores y financistas del globalismo – BlackRock, Vanguard, los ESG y los DEI
BlackRock y Vanguard son empresas de inversión. BlackRock tuvo un capital social (dinero que los socios han aportado) en 2024 de casi 40 mil millones de dólares. También tuvo activos (dinero destinado a generar beneficios en el futuro) de 10.5 billones de dólares (trillones en inglés). Vanguard por su parte tiene activos que suman 7.8 billones de dólares.
Ambas empresas globalistas exigen criterios para que las empresas reciban financiamiento. Entre esos criterios están:
El wokismo y los DEI: Diversidad, Equidad e Inclusión. La “diversidad” en realidad se refiere a la ideología LGBT, que injustamente colocan al mismo nivel que la raza. La “equidad” en realidad se refiere a exigir cuotas por concepto de raza o LGBT en empleos, puestos en el gobierno, etc. La “inclusión” se refiere a la aceptación total de la “diversidad” so pena de no dar financiamiento a las compañías que lo solicitan para sus inversiones.
También exigen a las empresas cumplir con los ESG: Medio ambiente (environment en inglés), Sociedad y Gobernanza (global). Para recibir financiamiento, las empresas deben penetrar la cultura con estas agendas. Pero últimamente han fracasado en empresas como BudLight, Target y otras más que se han negado a continuar promoviendo la dañina farsa de los ESG. Y se siguen sumando más compañías que rechazan estos ridículos, dañinos y engañosos criterios.
Actores y financistas del globalismo – Agencia del gobierno de EEUU para el Desarrollo Internacional (USAID)
La USAID fue fundada por el presidente Kennedy en 1961 para formar parte del poder ejecutivo. Lamentablemente, bajo presidentes proaborto ha dado cientos de millones de dólares a grupos abortistas extranjeros. También ha financiado otras causas malas, como la ideología LGBT y la del wokismo. Muchos de sus empleados se han ido independizando de sus verdaderos objetivos, que es ayudar a los países pobres. Estos individuos no actúan según los verdaderos intereses de EEUU y de su países amigos. Forman parte del “estado profundo”, para promover el globalismo y sus agendas antivida y anti familia, como ya hemos explicado. Son apátridas, no son verdaderos patriotas, como deberían ser.
Por todo ello, el presidente Trump, Elon Musk y el resto del gabinete ejecutivo han resumido el control de esta agencia y la están limpiando. Porque no pocos de sus empleados, a quien nadie ha elegido, han usado mal el dinero de los contribuyentes para promover ideologías contrarias al pueblo estadounidense y sus familias, así como a los países pobres que la USAID tiene el cometido de ayudar.
Actores y financistas del globalismo – El Foro Económico Mundial (WEF)
Ya hemos denunciado a esta entidad. De manera que nos limitamos a algunos datos remanentes. Como ya hemos señalado, fue fundado por el economista globalista Klaus Shwab de origen alemán, para reunir a líderes mundiales para “resolver los problemas globales”. Aunque ya sabemos que su verdadera intención es, en conjunción con la ONU y otros grupos de su calaña, establecer un gobierno mundial para imponer su agenda antivida y antifamilia, caracterizada por el wokismo, la ideología LGBT, el control demográfico, el aborto, el control financiero y aplastar las soberanías nacionales, las lealtades religiosas y familiares, el sentido patriótico de los ciudadanos y sus justas libertades civiles y políticas.
Ahora Shwab anda diciendo que en la actualidad nos encontramos en la “Era de la Inteligencia”. Él y sus globalistas quieren regular la Internet, las redes sociales y los medios de difusión, para supuestamente “regular” el uso de la inteligencia artificial (IA). Para ello, quieren eliminar toda la “desinformación” y los “discursos de odio”. Claro está, lo que realmente quieren, como ya hemos reiterado, es acallar las voces que se les oponen, especialmente las iglesias y las organizaciones que defienden la vida, la familia y la verdadera justicia social, la cual no tiene nada que ver con la ideología woke.
¿Cómo podemos detener la ideología del globalismo?
La ideología del globalismo forma parte integral de la “cultura” de la muerte. Es más, en cierto sentido la podemos identificar con ella. Lo primero y más importante, pero ciertamente no lo suficiente, es la oración. La Palabra de Dios nos dice en 2 Crónicas 7:14:
Si mi pueblo, sobre el cual es invocado Mi Nombre, se humilla, orando y buscando Mi rostro, y se vuelve de sus malos caminos, Yo le oiré desde los Cielos, perdonaré su pecado y sanaré su tierra.
La necesidad de la oración se hace más necesaria y urgente cuando comprendemos la desproporción tan grande que existe, en términos de recursos, entre los que defienden la vida y la familia y los que promueven la “cultura” de la muerte. Los enemigos de la vida y la familia tienen recursos económicos, políticos y mediáticos mucho más grandes que sus defensores.
Pero nosotros contamos con Dios, Quien es más poderoso que todas las fuerzas del mal. Por eso San Juan Pablo II nos alienta diciendo:
En este gran esfuerzo por una nueva cultura de la vida estamos sostenidos y animados por la confianza de quien sabe que el Evangelio de la vida, como el Reino de Dios, crece y produce frutos abundantes (ver Marcos 4:26-29). Es ciertamente enorme la desproporción que existe entre los medios, numerosos y potentes, con que cuentan quienes trabajan al servicio de la “cultura de la muerte” y los de que disponen los promotores de una “cultura de la vida y del amor”. Pero nosotros sabemos que podemos confiar en la ayuda de Dios, para quien nada es imposible (ver Mateo 19: 26). (Evangelium Vitae, no. 100.)
San Pablo nos ha enseñado que nuestra lucha es principalmente espiritual y que para ello se requieren las armas espirituales de la oración:
Nuestra lucha no es contra la carne y la sangre [es decir, las personas malas], sino contra los Principados, contra las Potestades, contra los Dominadores de este mundo tenebroso, contra los Espíritus del Mal que están en las alturas. Por eso, tomad las armas de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y después de haber vencido todo, manteneros firmes (Efesios 6:12-13).
En el mismo número apenas citado arriba de su Encíclica, el Papa nos dice:
Con esta profunda certeza, y movido por la firme solicitud por cada hombre y mujer, repito hoy a todos cuanto he dicho a las familias comprometidas en sus difíciles tareas en medio de las insidias que las amenazan: es urgente una gran oración por la vida, que abarque al mundo entero. Que desde cada comunidad cristiana, desde cada grupo o asociación, desde cada familia y desde el corazón de cada creyente, con iniciativas extraordinarias y con la oración habitual, se eleve una súplica apasionada a Dios, Creador y amante de la vida. Jesús mismo nos ha mostrado con su ejemplo que la oración y el ayuno son las armas principales y más eficaces contra las fuerzas del mal (ver Mateo 4:1-11) y ha enseñado a sus discípulos que algunos demonios sólo se expulsan de este modo (ver Marcos 9:29). Por tanto, tengamos la humildad y la valentía de orar y ayunar para conseguir que la fuerza que viene de lo alto haga caer los muros del engaño y de la mentira, que esconden a los ojos de tantos hermanos y hermanas nuestros la naturaleza perversa de comportamientos y de leyes hostiles a la vida, y abra sus corazones a propósitos e intenciones inspirados en la civilización de la vida y del amor.
Pero como ya hemos señalado, la oración, aunque absolutamente necesaria, no es suficiente. Necesitamos informarnos, formarnos bien y actuar. En esto Vida Humana Internacional humildemente ofrece su ayuda informativa y formativa a todos.
Debemos ser capaces de refutar la ideología del globalismo con buenos argumentos. Debemos penetrar en escuelas y universidades, informar a maestros y estudiantes. Debemos unirnos y establecer asociaciones provida, familia y patrióticas, entre otras.
Aquí debemos aclarar que ser patriota no tiene nada que ver con ser un fanático nacionalista. El verdadero patriota debe su lealtad primero a su país, pero es crítico de su propio Estado cuando éste es genuflexo ante el globalismo y la “cultura” de la muerte o cuando el Estado no respeta la vida, la religión o la familia, a quienes debe respetar y servir. El patriota quiere lo mejor para su país y esto incluye el tener buenas relaciones económicas, políticas y de respeto mutuo con otros países que no son comunistas ni globalistas.
Debemos ser activos en la política, cada uno según sus posibilidades, talentos y recursos. Decir que los cristianos no se meten en política es mentira. La Doctrina Social de la Iglesia desmiente totalmente este grosero disparate. Debemos informarnos bien acerca de los candidatos políticos, para poder votar bien y también para poder botar bien, es decir, sacar a los globalistas y a los anti vida de sus puestos. También debemos informar a los mismos políticos de los planes de los globalistas y del daño que hacen y planean hacer. Si se tiene la vocación y los recursos, se debe aspirar a un puesto político.
También debemos unirnos a otros patriotas para reclamar derechos y echar a los políticos apátridas. Debemos exigir el retiro de planes inmorales (educativos, de salud, etc.) y de las ONG antivida (IPPF, MSI, IPAS, etc.), así como de financistas antivida (como Soros, Gates, Rockefeller, etc.). Hay que vigilar y denunciar sus actividades, sus trampas y sus mentiras. Debemos contemplar la posibilidad, incluso, de que nuestros países se salgan de la ONU y de la OEA o, si ello no es posible, negarnos a aceptar sus agendas. Unidos y con la ayuda de Dios lo podremos lograr.
_______________________________