¡Cristo ha resucitado, Aleluya, Aleluya!
Mis queridos amigos en Cristo:
A medida que nos preparamos para comenzar el Triduo Pascual, reflexionemos en las palabras del Papa San Juan Pablo II:
La Resurrección de Jesús es el evento fundamental sobre el cual descansa la fe cristiana. La Resurrección de Cristo es la fuerza, el secreto del cristianismo. No es una cuestión mitológica o un mero simbolismo, sino un evento concreto. Está confirmado por pruebas seguras y convincentes. La aceptación de esta verdad, aunque es el fruto de la gracia del Espíritu Santo, se fundamenta al mismo tiempo sobre una base sólida e histórica.
La Resurrección de Jesús significa el triunfo del bien sobre el mal, el pecado y la muerte. Se trata de un evento singular que demuestra que los que confían en Dios y aceptan a Cristo resucitarán también de entre los muertos. Al respecto, el Papa Francisco nos enseña que,
Es precisamente la Resurrección la que nos ofrece la esperanza más grande, porque abre nuestras vidas y la vida del mundo al futuro eterno de Dios, a la felicidad completa, a la certeza de que el mal, el pecado y la muerte pueden ser conquistados. Esto implica que podemos vivir nuestras vidas cotidianas con más confianza, enfrentando cada día con valor y compromiso. La Resurrección de Cristo arroja una nueva luz sobre nuestras realidades diarias. ¡La Resurrección de Cristo es nuestra fuerza!
El gozo de la Pascua, por consiguiente, lo transforma todo y proporciona el poder y la visión para transformar pueblos, culturas y sociedades. Transforma el miedo en amor, la desesperanza en gozo, la oscuridad en luz, la ansiedad en esperanza – de estar espiritualmente muertos a estar vivos para Dios.
Gracias a todos por todo lo que cada uno de ustedes hace por servir a la causa del Evangelio de la Vida. Gracias a tu fe y testimonio – “como lámpara colocada en lo alto, que ilumina a todos los que habitan en la casa” – estamos salvando muchas vidas, tanto en la esfera temporal como en la espiritual.
En nombre de nuestro personal y de la familia global de Vida Humana Internacional, deseo y pido a Dios que cada uno de ustedes y sus familias sean llenos del gozo Pascual y experimenten la gracia del Señor Resucitado y el poder del Espíritu Santo que les ayuda a convertirse en nuevas criaturas en Cristo.
Tú y tus intercesiones serán incluidas en mi celebración de la Misa del Domingo de Resurrección y a través de toda la temporada Pascual.
¡Feliz Pascua de Resurrección!
Padre Shenan J. Boquet
Oh muerte, ¿dónde está tu aguijón, dónde está tu victoria? Cristo ha resucitado y los demonios son echados fuera. Cristo ha resucitado y la tumba está vacía y muerta. Porque Cristo, al resucitar de entre los muertos, se ha convertido en el primer fruto de los que duermen. A Él sea la gloria y el poder por los siglos de los siglos! ¡Amén! Aleluya! ¡Aleluya! ¡Aleluya! – San Juan Crisóstomo.