¿Qué es la “educación” sexual integral?

 

Adolfo J. Castañeda, MA, STL

Director de Educación

Vida Humana Internacional

adolfo@vidahumana.org

www.vidahumana.org

(305) 260-0525

12 de marzo de 2024

 

 

La “educación” sexual integral (ESI) es el nombre engañoso que los promotores de la “cultura” de la muerte le dan a su adoctrinamiento sexual inmoral a niños, adolescentes y jóvenes en escuelas y centros de salud.

 

 

¿Por qué es importante conocer acerca de esta “educación” sexual?

 

Porque esta “educación” sexual es la puerta hacia el resto de la “cultura” de la muerte: anticoncepción, esterilización, aborto, control demográfico, etc. La ESI corrompe la mente y el corazón de niños, adolescentes y jóvenes para que acepten todos estos males. Los convierte en personas sexualmente permisivas y hedonistas (búsqueda del placer a toda costa). Se trata de controlar la manera de pensar de toda una generación.

 

 

¿En qué consiste la “educación sexual integral”?

 

La ESI consiste en “enseñar” de manera sutil – y muchas veces no tan sutilmente – la aceptación de la fornicación, la masturbación (en niños de 5 años en adelante), la homosexualidad, la perversa ideología de “género”, la anticoncepción, la esterilización, el aborto y el miedo a tener muchos hijos para no causar el “cambio climático”.

 

De forma sutil, pero muy real, la ESI impone esta inmundicia de espaldas a los padres de familia y también en abierta contradicción a su derecho-deber de ser los primeros y principales educadores de sus hijos. La ESI no respeta los valores y costumbres religiosas de muchos padres de familia, especialmente en países en vías de desarrollo.

 

 

¿Quiénes promueven esta “educación” sexual inmoral?

 

En EEUU, la promueven y la implantan el actual gobierno Demócrata del Presidente Joseph Biden, el gigante abortista Planned Parenthood, acusado de traficar con órganos de bebés abortados en sus instalaciones; el Consejo de Información y Educación Sexual de EEUU (SIECUS, por sus siglas en inglés); las escuelas públicas de muchos estados y algunas escuelas privadas.

 

En el resto del mundo, la ESI es promovida e implantada por gobiernos ricos occidentales (especialmente EEUU), los cuales financian a los grupos internacionales que la promueven – las agencias de la ONU, la Federación Internacional de Planificación de la Familia (IPPF) y otros grupos antivida y antifamilia y pervertidores de menores. También la promueven e implantan los gobiernos nacionales de países en vías de desarrollo, como los de América Latina, presionados económicamente por los gobiernos y grupos internacionales apenas mencionados.

 

 

¿Qué agencias de la ONU promueven la ESI?

 

Todas las agencias de la ONU promueven la perversión sexual de menores, adolescentes y jóvenes. Pero las que más se destacan son la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Fondo de Población de la ONU (UNFPA), el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y ONUSIDA. Hay que tener en cuenta que la ONU colabora muy estrechamente con la IPPF. Sus planes de ESI son prácticamente iguales de perversos.

 

 

¿Qué estrategias utilizan los promotores de la ESI?

 

La transversalidad. Se refiere a incluir elementos de “educación” sexual en todas las asignaturas y no solo en las clases específicamente diseñadas para adoctrinar a los estudiantes sobre este tema.

 

La “integralidad”. Se refiere a considerar la sexualidad como parte integral de la persona y no solo algo aislado. Es cierto que la sexualidad humana es una dimensión integral de la persona. Pero los promotores de la ESI tergiversan esta verdad para promoverla a todo nivel y en todas las edades.

 

La ESI trasciende el ámbito escolar. Precisamente la característica de “integral” ha dado paso a la estrategia de incluir la ESI en los centros de salud. De hecho, ha habido acuerdos a gran escala entre los sistemas educativos y sanitarios de muchos países, incluyendo los de América Latina, para promover la ESI. En las “clínicas” de “salud”, los promotores de la ESI (muchas veces de espaldas a los padres) les dan anticonceptivos, condones y “servicios” de abortos a adolescentes y jóvenes. Por supuesto, muchas veces las escuelas envían a sus estudiantes a las “clínicas de salud” de su localidad para que ellos reciban estos mal llamados “servicios”.

 

La estrategia de la inclusión. Esta estrategia consiste en mesclar cosas buenas con cosas malas “en un mismo saco” para engañar a la gente y especialmente a los padres de familia. En un mismo “centro de salud” se atienden infecciones de trasmisión sexual y se reparten anticonceptivos y condones para supuestamente “prevenir” el aborto y las ITS. Pero la experiencia ha demostrado que la ESI, sobre todo en EEUU, ha sido un monumental fracaso como se verá más adelante. Estos programas a veces también incluyen la abstinencia sexual, pero insisten en que no funciona y luego el resto del contenido es a favor de los anticonceptivos, los condones, etc.

 

La “prevención” de males. Los promotores de la ESI la promueven como “necesaria” para prevenir el bullying contra los estudiantes gais o trans, para en realidad promover la homosexualidad y la ideología de “género” y el “transgenerismo”. (Todo tipo de bullying debe ser prohibido y no solo el que se lleva a cabo contra estos estudiantes.)

 

También la presentan como “necesaria” para “prevenir” las ITS por medio de los condones y el aborto por medio de los anticonceptivos. Pero todo esto es pura mentira. La experiencia de muchos años de “educación” sexual en EEUU y otros países ha demostrado que ésta ha sido un monumental fracaso. Desde que la ESI ha sido implantada en EEUU en 1970, los casos de abortos e ITS en adolescentes y jóvenes han aumentado vertiginosamente. La ESI promueve la promiscuidad y ésta a su vez lleva a las ITS y al aborto porque los condones y los anticonceptivos fallan, sobre todo en adolescentes y jóvenes consumidos por la pasión del momento. Hoy en día, hay cerca de 9 millones de casos nuevos de ITS/SIDA cada año en EEUU y unos 200,000 abortos anuales en adolescentes, más de la quinta parte de todos los abortos anuales en ese país (cerca de un millón).

 

La ESI como “derecho” humano. Precisamente al incluir la ESI en los “servicios” de “salud”, ésta se convierte en un “derecho humano internacional” porque la atención a la salud es un derecho humano. De esa manera, les es más fácil obligar, sobre todo a los países en desarrollo, a que acepten los planes de ESI a condición de recibir ayuda económica para “combatir” la pobreza y aumentar los “servicios de salud”.

 

El uso de slogans engañosos. La manipulación del lenguaje es la manera más eficaz de engañar a la gente. Por ejemplo, los proaborto y los promotores de la ESI llaman a estos males “salud reproductiva”, y “derechos sexuales y reproductivos”, entre otros.

 

La estrategia del silencio. Los promotores de la ESI casi nunca mencionan el matrimonio entre un hombre y una mujer, y la familia que se funda en esa unión, la cual debe ser indisoluble y abierta a la vida. En vez de ello, hablan de “parejas”, de “derecho al placer” (fornicación u homosexualismo) y de “distintas formas de familia” (los mal llamados “matrimonios homosexuales” con hijos adoptados o producidos por técnicas inmorales y destructoras de incontables embriones humanos, como la fecundación in vitro). Este es, a largo plazo, el peor engaño de todos, pues subvierte la base misma de la sociedad y de la civilización, que es la familia que se funda en el matrimonio verdadero.

 

 

¿Qué podemos hacer?

 

1) Los padres de familia deben enseñar la castidad a sus hijos. Recomendamos el documento magisterial “Sexualidad humana: Verdad y significado”. Tenemos un resumen disponible en nuestra oficina. Escriba a adolfo@vidahumana.org. Visite: Educación Sexual vs. Castidad – Vida Humana Internacional. También animamos a todos a tomar nuestro curso de capacitación provida. Para América Latina, contacte a Roxaida López: roxaidalopez@gmail.com. Para EEUU: Adolfo J. Castañeda: adolfo@vidahumana.org.

 

2) Los padres deben unirse con otros padres y juntos exigir que se retiren estos programas de las escuelas y centros de salud. Deben exigir que sus derechos sean respetados como anteriores al Estado.

 

3) Todo ciudadano decente debe exigir que su gobierno no les dé ni un centavo a la ONU ni a ninguna otra organización que promueva la ESI.

 

4) Orar mucho y ayunar para que el Señor convierta los corazones de los que promueven esta inmundicia, se desbaraten sus planes y se implante el respeto a la castidad a todo nivel.

 

5) En este sentido, los padres de familia que practican la anticoncepción deben arrepentirse de esta práctica y confesar su pecado (para así poder comulgar y acceder al camino de salvación). Los padres de familia que practican la anticoncepción no pueden enseñar la castidad a sus hijos pues ellos mismos no están viviendo la castidad conyugal, que consiste en el respeto a los valores inherentes a la sexualidad humana en el matrimonio: el amor conyugal y la apertura a la vida.

 

 

¿Dónde puedo obtener más información y las fuentes de todo lo afirmado en este folleto?

 

Este tema también lo abordamos en más detalle y con todas sus fuentes en nuestro curso de capacitación provida. Le invitamos a adquirirlo, escriba a: adolfo@vidahumana.org. También en Vida Humana Internacional (305) 260-0525, adolfo@vidahumana.org, www.vidahumana.org. Visite en nuestra página la sección sobre este tema en: Educación Sexual vs. Castidad – Vida Humana Internacional.

 

También es muy importante informarles que este artículo lo tenemos en formato de volante en una sola hoja impreso por ambos lados, ¡lo cual lo hace muy fácil de reproducir y distribuir por todos lados! Por favor, escríbannos a adolfo@vidahumana.org ¡y se lo haremos llegar por correo electrónico completamente gratis!

 

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